Por rociosalazarp, desde Chile
Puede
parecer de un relajo absoluto el nombre de esta columna, pero no. Les cuento.
Vivo en Viña del Mar, la capital turística de Chile, y me carga el verano en
esta ciudad. Sí, soy el grinch de las vacaciones en Viña porque me parece de una
carencia de originalidad absoluta que todo el mundo quiera venir para acá, y finalmente lo hagan. Asumo
que es una ciudad hermosa, las playas son simplemente fascinantes (y no
me gusta la playa), la vida nocturna y gastronómica es muy variada (obvio,
vivimos de eso), hoteles hay por mil a pesar de ser una ciudad pequeña (suenan
los grillos en invierno), la costanera invita a caminar kilómetros (y de la
mano de alguien es mejor), y la gente… la gente es lejos lo mejor de aquí, somos
seudo citadinos en un pueblo de turistas, todos muy amables y con ganas de
pasarlo bien, tenemos el gen del turisteo y somos capaces de tomar un grupo desconocido y
pasearlo sin exigir nada a cambio. Así puedo seguir por horas porque estoy completa
y totalmente enamorada de mi ciudad, pero en otoño, invierno y primavera. Porque
el verano en Viña del Mar es, para un originario, un perfecto desastre. Todo
lleno de gente (uno sale de su hogar y literalmente hay mucha gente en la calle
haciendo, aparentemente, nada), muchísima bulla (vivo en el centro, cerca de
muchos bares, y no aguanto los gritos de desenfreno a toda hora). A veces me da
la impresión de que la gente viene a destruir su hígado y a invocar un ataque
al corazón de tanto gozar. No tenemos espacio para tantos autos, así que
por favor venga en otro medio de transporte. Hay que hacer reserva, ¡RESERVA!,
o esperar más de 1 hora a que llegue el sushi. Ni se le ocurra ir a un centro
comercial porque no se puede caminar (a veces me da la impresión de que la
gente veranea ahí… bueh…). En fin, la paz y tranquilidad se esfuman dando paso
a la locura del veraneante en pleno, porque a esta ciudad no viene la tercera
edad a relajarse, NO, viene el cabro joven y loco, en el apogeo de su vida sexual y quiere
expresarla en todas partes.
A
este pueblo Viñamarino (somos pueblo y nadie puede decir lo contrario), al lado
de Valparaíso (puerto bohemio al que solamente voy de noche al carrete non stop),
viene todo el mundo. Personas de “las europas” (como escuché por ahí y morí de
una carcajada), de “los estados juntos” (esos que son más de 50 y que están al
norte de México), de una islita llamada Oceanía (le dicen continente, a mi me
parece una simple islita) y de todos los rincones en general, hasta camboyanos
me he encontrado (¡JA!). Entonces, en época veraniega se hablan todos los idiomas porque
hay más extranjeros que pueblerinos, pero de noche, después de varios tragos
por la felicidad desenfrenada de las vacaciones, se habla solamente uno, ese
que no se entiende pero con el que todos logran comunicarse (sí, ese idioma que todo hemos hablado por lo menos una vez).
Qué
más puedo decir… ¡VENGAN A VIÑA! esta ciudad es un infierno en verano, pero la amo como a mi
vida y no me iría de aquí jamás. Y si logran venir algún día yo los paseo, les muestro todo lo necesario para que se vayan amándola tanto como yo y quieran volver por más (no se me quita esto del anfitrionismo turístico).
Muchas veces me he preguntado... qué sería de mi vida si me instalara a vivir en Viña despues que salga de la u y encuentre una pega... En verdad lo he pensado sólo por el clima, pero me agrada la idea de tener el mar ahi siempre, en fin. Buena entrada, linda! :)
ResponderEliminarAhhhhh!!! no sabes como me identifico con lo que comentas . Soy Viñamarina y ya estoy con mi "colapso veraniego".
ResponderEliminarNo soporto tanta gente !!!!!
Este es el costo de vivir en una ciudad tan bella como Viña del Mar y que obviamente TODO EL MUNDO quiere conocer (ya llegaron todos , cierto???? :S )
Me siento muy orgullosa de vivir en esta ciudad, así que a pesar de mis "colapsos" están todos cordialmente invitados a disfrutar de VIÑA DEL MAR.
Un abrazo
Viviana
a ciudad, así que a pesar de mis "colapsos" están todos cordialmente in
ResponderEliminarhttp://www.watchoftagheuer.com
Uff... me imagino la locura que debe ser Viña en el verano, y creo que es una de las cosas que me detiene de agarrar mis cosas y partir a vivir a Viña, que para mi representa la combinación perfecta para vivir... hermosa vista, tranquilidad, diversión y sobre todo civilización.
ResponderEliminarY bueno, ese colapso del que hablas es el que me lleva a visitar Viña solo de Marzo a Noviembre, nunca hago planes de visitar la ciudad en pleno verano!