Por Ailén Rodríguez desde Uruguay
Desde niñas a adolescentes, la construcción de la autoestima suele ser sin dudas un camino por demás árido y ríspido de recorrer. ¿Qué papel e incidencia tienen en las jóvenes de nuestro siglo las redes y la internet?
Sin dudas, el acceso permanente a información e imágenes de celebridades, así como de perfiles de amigos y amigos de amigos, puede ser algo por demás informativo y divertido. Pero, ¿qué pasa con la autoestima y la construcción de la personalidad frente a un bombardeo permanente de datos?
Nuestras adolescentes y jóvenes se enfrentan permanentemente a un mundo por demás sexualizado, comercial y material. En donde las jóvenes desinhibidas son las que conquistan el mundo, las populares y exitosas.
No cabe duda que la liberación femenina, en cuanto a cánones machistas, es más que plausible, así como sana y necesaria. Pero necesariamente eso ¿debe traducirse en libertinaje sexual a temprana edad?
En estos días navegando, me encuentro con esta foto de una Directioner (término utilizado para las fans de el grupo musical juvenil One direction), en donde en un cartel expresa que cosas hace (y puede hacer, sin decirlo expresamente) de rodillas.
Si pensamos en el público mayoritario de One Direction, el rango etario es de unos 15 a 17 años, aproximadamente.
El despertar sexual de los jóvenes en nuestro tiempo es cada vez más acelerado, pero no necesariamente acompañado de la madurez suficiente para manejar situaciones que la sexualidad, como tal, trae aparejada.
¿Cómo puede repercutir en la vida de esta joven este episodio? ¿Qué puede pasar con sus pares? ¿Y en las redes? Esta foto fue compartida en la web del Canal E! Vale aclarar que ellos mismos censuraron la cara de la joven, que sin dudas, en su entorno inmediato se debe saber quién es...
¿Cómo construye una joven mujer su identidad, en nuestro tiempo? Acaso las redes sociales, que arrastran fanatismos y conductas casi necesarias para pertenecer, ¿condicionan el crecimiento natural de las chicas?
Lo que hacía unos años en todas nosotras un grupo de pares, o como mucho una película, hoy esta multiplicado hasta el cansancio por videoclips, series televisivas, Internet en los móviles, y todas las redes sociales, de las cuales un adolescente es casi incapaz de mantenerse al margen.
El rol de los padres sin duda debe ser fundamental. El control (bien entendido), el enseñar y formar sobre las redes, tanto en casa como en los centros educativos, puede ser una herramienta más que al alcance de la mano para evitar que cualquier chica termine escrachada (termino usado como sinónimo a "haciendo el ridículo") en las redes, sin capacidad (sobre todo emocional) de enfrentar eso.
El rol de los padres sin duda debe ser fundamental. El control (bien entendido), el enseñar y formar sobre las redes, tanto en casa como en los centros educativos, puede ser una herramienta más que al alcance de la mano para evitar que cualquier chica termine escrachada (termino usado como sinónimo a "haciendo el ridículo") en las redes, sin capacidad (sobre todo emocional) de enfrentar eso.
Claro que la autoestima juega un rol fundamental en todas estas situaciones, y el nivel que se tenga de ella es decisoria al momento de publicar ciertas cosas o realizar públicamente actos que más tarde puedan estar acompañados del escarnio público.
Lo que antes podía ser sólo el ridículo en nuestro lugar de estudios o entre nuestros amigos, hoy se corre el riesgo de ser conocido por toda la red y, por ende, por gran parte de la población mundial.
Preservemos a nuestras jóvenes. Eduquemos para un correcto manejo de las tecnologías de la información, así ninguna mujer deberá ser víctima a nivel mundial de un momento de tontería o de la falta de su autoestima.
*Esta pretende ser la primer entrada sobre este tema en donde posteriormente abordaremos el Cyberbulling, entre otras modalidades de condicionamiento de la conducta que ejerce la red.
Que interesante, toda la razón. La gente no sabe lo poderosas que son las redes sociales. Tampoco saben los peligros de compartir sobre todo ciertas fotos, la gente anda publicando todo lo que hace, lo que piensa, hasta foto de su intimidad, hijos y otros. No hay filtro o compartimiento con responsabilidad. Creo que hay que usar estos medios con mucho cuidado, imaginar que es un arma de doble filo y saber qué y no decir o compartir. Hay que tener mucho cuidado y responsabilidad, y si los niños o adolescentes no saben, los padres y los mayores son los que tienen la responsabilidad de educarlos y controlarlos.
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