Hace tiempo ya que está de moda el vilipendio por Facebook, el reclamar por todo en una especie de anarquismo cobarde que sólo toma forma desde la seguridad que te ofrece el estar detrás de la pantalla. Pero, ¿qué tanto hacen estas personas por las causas y funas que tan fervorosamente comparten por las redes sociales?
Se acerca otra Teletón y el tema de máxima contingencia nuevamente es el “gran destape” de las finanzas de obra en favor de niños y jóvenes con discapacidad. Pero, ¿realmente es un destape? ¿Realmente pensábamos que Don Francisco hacia todo esto gratis? ¿Que las empresas donaban altruistamente todos estos millones desde la bondad de sus corazones? ¿Tan ingenuos somos?
La primera oleada de artículos compartidos se trató plenamente del asco que había detrás de la Teletón, de los porcentajes de las recaudaciones que sacaba cada uno de los colaboradores y la mecánica de la donación de las empresas a través de la venta de productos marcados. Si hasta foto de Don Francisco con Pinochet sacaron, lo que realmente es rebuscado porque no sé qué tendrá que ver lo uno con lo otro.
La segunda oleada se veía venir, y es la gente que defiende la Teletón, que tiene un hijo, hermano, tío, abuelo, padre, vecino, primo lejano o amante que usó o usa activamente los servicios del Instituto Teletón: que nadie entiende la lucha del minusválido y lo desalmado de la gente que se estaciona en los estacionamientos de discapacitados sin necesitarlos, lo que tampoco encuentro que tenga mucho que ver con el tema que se está tratando.
Ahora, siendo bien amarilla, ambos lados tienen razón y ambos lados exageran colosálmente.
Para defender a los de la primera oleada digo que los detractores de la Teletón no despotrican contra el Instituto Teletón y sus centros de rehabilitación, la indignación está, y la comparto, en el lucro desmedido de los que participan poniendo cara de pena y llorando con los famosos testimonios. Don Francisco se lleva para su bolsillo 5% de lo recaudado en la famosa meta que cada año es más grande y desmedida. Ahora, ¿quién cree que cuando don Francisco salta de alegría cada vez que aumenta el número en la pantalla es porque está calculando cuánto será el 5% de lo que se está mostrando? ¡Yo sí! Porque si fuera él estaría pensando lo mismo, y cualquiera si supiera que el 5% de ese largo número es suyo. Otro gran porcentaje va a pagar los sueldos de los artistas que se ponen la mano en el corazón y van a “ayudar”. Si realmente quisieran ayudar, ¿qué le cuesta al Bombo Fica ir a hacer su show gratis una hora? Si no quiere perder plata que no vaya no más. Los números se manejan para que siempre se pase la meta a última hora y con bombos y platillos. El niño símbolo es una marioneta usada para darte pena y manoseada de comercial en comercial sin ni uno para su bolsillo, pero si para el de Don Francis, a su lado en el mismo comercial. Me acuerdo del niño símbolo del año pasado, que contaba que él es metalero de corazón y ¡después lo chantaban en un comercial cantando una canción de reggaetón pobre sobre la Teletón!
Mi llamado es a no donar. Si quieren ayudar junten esa plata y vayan directamente a un centro de la Teletón y la donan directamente ahí. No le paguen el sueldo a Don Francisco y a la manga de artistas baratos que se suben al escenario. Con la donación de las empresas es más que suficiente, la ley de donaciones fue creada para eso y van a donar sí o sí para poder ahorrar en impuestos. Así que señora, que su hijo no rompa el chanchito este año sólo por un globo y una pulsera de la Teletón. También recuerde que los trabajadores del Banco de Chile no se les paga por ir a trabajar esos días y tampoco lo hacen por elección propia, se les obliga. Cambie el canal o salga a dar una vuelta. Son dos días perdidos en la televisión abierta chilena.
... ¡Y que venga la modelo!
No es solo que este en desacuerdo contigo sino que además el articullo es desarmado, no tiene base en nada. Es solo una opinión hueca que tiene como bibliografia mucho memes. Lo unico bueno de este blog es el diseño, pero de paso también es malo porque da la idea de que lo que se escribe está tan bien pensado como el diseño. Es patetico el afan de figurar, tanto como el que critica en la Teletón. Consejo: anda a la Teletón a ver si te rehabilitan el cerebro.
ResponderEliminar"anónimo" te ha dejado un comentario..... que valientes nos hace la pantalla del computador...jajajajajajaja
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