Hace muchos años tenía ganas de tatuarme, el problema era que no tenía el dinero, ni el permiso de mis papás, ni una idea concreta sobre lo que quería, siempre la idea que se me venía a la mente era un gato ya que los amo con mi vida, pero tampoco me convencía mucho la idea ya que he tenido tantos gatos en mi corta vida que era un poco difícil escoger a cual de todos iba a llevar para siempre en mi piel.
Con mi prima siempre hablábamos de hacernos un tatuaje, nos enviábamos miles de fotos que nos gustaban hasta que se pensó y se hizo, decidimos buscar algo que nos gustara a ambas, luego comenzó la difícil tarea de encontrar al tatuador o tatuadora. En Santiago existen miles y por eso se nos hizo tan difícil decidirnos, lo que queríamos era una luna de un tamaño no pequeño pero tampoco grande. En toda la búsqueda encontramos personas que nos cobraban mucho más del precio estándar, que estaba entre los $10.000 y $15.000. Sé que los tatuajes son caros, pero algunos se excedían demasiado, hasta que encontramos a alguien que cobraba el precio estándar y llevaba años tatuando.
Llego el día que estábamos esperando hace tanto tiempo y los nervios estaban a flor de piel, debo admitir que estaba muerta de miedo. Sé que era algo pequeño, pero me daba mucho miedo y nervios el no saber qué tipo de dolor iba a sentir ya que a todos mis conocidos siempre les preguntaba a qué dolor se parecía, todos me decían que era un dolor diferente y que no se podía comparar.
La tatuadora dibujó ahí mismo el diseño de la luna y nos preguntó si nos gustaba o no. Nos gustó, así que fui la primera en hacerme el tatuaje, me senté y creo que tenía una cara de miedo que me llegaba al suelo. La niña fue demasiado simpática y amable con nosotras, le pregunté si dolía mucho y me dijo que no y que iba a hacerme una pequeña línea para ver qué sentía. Así que comenzó a tatuarme y era algo tan pequeño que se debe haber demorado unos cinco minutos. De una escala del 1 al 10 me dolió un 2, la verdad es que un dolor bastante soportable, era algo pequeño así que no debía dolerme tanto. Quedé feliz con mi tatuaje y los cuidados fueron bastante simples, a las 2 semanas de habérmelo hecho ya estaba cicatrizado y en verdad me encantó, ya que es algo que va estar por siempre en mi piel y además tiene un significado muy especial para mí.
Entrada enviada por NicolePaz, Chile.
mi primer tatuaje me lo hice a los 16 pero lamentablemente en un lugar no muy bueno y hasta el día de hoy pienso en hacerme algo ahí porque encuentro que se ve tosco y los trazos muy gruesos; el segundo me lo hice cerca de los 20, y el tercero que es mi favorito a los 25. El ultimo es grande y con hartos colores, sufrí pero lo amo y es mi caracteristica principal, la mayoria de la gente que me conoce no puede no asociarme a mi con esa figura donde sea que la vean...me lo remarqué hace varios años ya y ahora tendría que hacerlo de nuevo epro sufri tanto la ultima vez que aun lo estoy pensando...imaginen que me he desmayado con inyecciones jajajaj aún no se como me pude hacer ese tatuaje con el miedo que le tengo a las agujas
ResponderEliminarA veces me pica el bichito por hacerme uno. Pero la verdad no me muero por hacerme algún motivo. Buena entrada y me gusto también la anterior. Tienes red social?
ResponderEliminarBesos,
aww muchas gracias daniela :) me puedes buscar en facebook como Nicole Paz o mi twitter Nicolepaz_ :)
Eliminarme di cuenta que hay muchas nicole paz en facebook asi que mejor te dejo el link https://www.facebook.com/nicolepazyc
EliminarEs muy lindo el tatuaje que elegiste!!!
ResponderEliminarYo también, siempre he pensado en hacerme uno y sé que lo haré, pero aún no me lanzo. También me gustan como el que elegiste. Gracias por compartir con nosotras tu experiencia :)
Tienes el dato de la tatuadora? :)
ResponderEliminarEl primer tatuaje es como la apertura de un nuevo capítulo en la piel. Un símbolo, una fecha o un diseño especial; un recordatorio duradero de un momento, idea o pasión.
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